Lacedemón


Cuando un día Hera descubrió que las hijas de Atlante, las Hespérides, a quienes había confiado el árbol, hurtaban las manzanas (Al Haud), mandó al siempre vigilante dragón Ladón (Muscida) para que se enroscara alrededor del árbol como su guardián.




Otra versión de La cierva de Cerinia es que era la que la pléyade Táigete (Taygeta), hermana de Alcíone, había dedicado a Artemis en agradecimiento por haberla transformado temporalmente en cierva (Capella) y haber podido eludir así los abrazos de Zeus. Sin embargo, no era fácil engañar a Zeus por mucho tiempo, y finalmente engendró de él a Lacedemón (Muscida); inmediatamente después del parto ella se ahorcó en la cumbre del monte Amicleo (Phecda), que en adelante se llamó monte Taigeto.


La sobrina y homónima de Táigete (Mahasim) se casó con Lacedemón (Muscida) y tuvo con él a Hímero (Al Taj), a quien Afrodita hizo que desvirgara sin saberlo a su hermana Cleódice (Tabit), en una noche de diversión promiscua. Al día siguiente, al darse cuenta de lo que había hecho, Hímero se arrojó al río (Eridano) -al que a veces se le llama por su nombre- y nunca más se le volvió a ver.
(Robert Graves: Los MItos Griegos)


